No sin cierta melancolía vimos como las puertas del Baja Beach Club nos pegaban en las narices, cerrándose el año pasado. A pesar de la juerga de las fiestas de solteras, de los camareros-bailarines semidesnudos y del tema hawaiano artificial, todo aquello tan hortera tenía su encanto. Llegó el Opium, elegante, pero con muy poca diferencia a lo que ya era ofrecido al lado, en CDLC o Shôko.

Por eso es casi ironico que Opium tendrá un competidor en su local original del Cine Astoria, gracias a las artes de un antiguo socio de Shôko. Cruzando la calle, Ignacio Furest está abriendo Lemon Twist, en lo que una vez fue el Rincón del Jamón.

El concepto inicial puede sonar un poco confuso - qué es eso de mezclar un bar de tapas con pizzería, con cócteles y con night club? - pero, bueno, apegarse a lo tradicional nunca ha sido el punto fuerte de la pandilla que también nos trajo Salsitas y el legendario Octopussy.